¿Problemas con el detector? A veces el fallo no está en la muestra

La entrada aborda los fallos más comunes en los detectores de HPLC y cómo identificar su origen. Distingue entre problemas electrónicos, que deben resolverse con el fabricante, y fallos mecánicos u ópticos, que suelen centrarse en la celda de flujo. También se detallan las señales de advertencia como burbujas, contaminación o presión elevada, y se mencionan aspectos críticos del mantenimiento, como el estado de la lámpara o la configuración de parámetros como ganancia y tiempo de respuesta. El texto proporciona consejos prácticos para diagnosticar y prevenir errores que afectan directamente la calidad del análisis cromatográfico.


Cuando algo falla en el detector, el síntoma puede ser sutil o llamativo: una línea base ruidosa, picos inestables o una caída inesperada en la sensibilidad. Lo primero es saber de dónde viene el problema, ya que suele tener dos orígenes posibles: electrónico o mecánico/óptico.

Los fallos electrónicos —como errores de conexión o circuitos dañados— deben ser atendidos directamente por el fabricante del equipo. Pero muchos de los problemas más frecuentes están relacionados con la celda de flujo, el corazón óptico del detector.

Señales de alerta que pueden indicar un problema en la celda:

  • Burbujas de aire atrapadas

  • Contaminación interna

  • Fugas o presión excesiva

  • Daños por mal manejo o desgaste

Todo esto puede traducirse en una respuesta reducida del detector, fluctuaciones en la línea base o incluso picos espurios. Además, algunos detectores, como los de índice de refracción, utilizan celdas especialmente sensibles a la presión: si se exceden los valores recomendados por el fabricante, el cristal de la celda puede romperse fácilmente.

Tampoco hay que olvidarse del estado de los componentes internos del detector: una lámpara envejecida, un ajuste incorrecto del tiempo de respuesta o una ganancia mal configurada también pueden comprometer la calidad del análisis.

 

 


Artículos recomendados

Ver todos
Cómo elegir la balanza adecuada para tu laboratorio: claves técnicas y recomendaciones
Cómo elegir la balanza adecuada para tu laboratorio: claves técnicas y recomendaciones
La entrada del blog ofrece una guía práctica para elegir la balanza de laboratorio más adecuada, destacando los principales factores técnicos como legibilidad, repetibilidad, linealidad, capacidad, tiempo de estabilización, calibración y conectividad. También aborda aspectos ambientales y normativos, enfatizando la importancia de adaptar el equipo a las condiciones reales del laboratorio. Está orientada a técnicos, investigadores y responsables de compra que buscan optimizar precisión y eficiencia.
Filtros y precolumnas: pequeños aliados con gran impacto
Filtros y precolumnas: pequeños aliados con gran impacto
Esta entrada destaca la importancia de los filtros en línea y las precolumnas en los sistemas HPLC, elementos que muchas veces se consideran accesorios, pero que pueden tener un impacto decisivo en la estabilidad del sistema y la vida útil de la columna. El texto explica su función como barrera frente a partículas y contaminantes, cómo elegirlos correctamente según el tamaño de poro, y cómo detectar cuándo es momento de reemplazarlos. También se profundiza en las precolumnas como elementos clave para evitar contaminaciones permanentes y proteger la fase estacionaria principal.
El inyector en HPLC: pequeño gesto, gran impacto
El inyector en HPLC: pequeño gesto, gran impacto
Esta entrada invita a prestar atención a un componente muchas veces olvidado del sistema HPLC: el inyector. Aunque parece un paso mecánico rutinario, su mal funcionamiento puede ser el origen de picos deformados, ruido en el cromatograma o problemas de reproducibilidad. El texto ofrece recomendaciones clave para asegurar una inyección limpia, reproducible y segura, desde la correcta disolución y filtración de la muestra hasta el mantenimiento mecánico del inyector y sus componentes.